Mundo Linóleo
Desde Cricklewood para todo el planeta

Contraste

El cambio repentino de vivir en una gran zona metropolitana  de más de cinco millones de habitantes a un pueblo de tan solo 330 personas puede ser traumático para muchos, sin embargo para mí ha sido una experiencia enriquecedora. Realmente, antes de venir a Nebraska, estaba tan harto de viajes en metro, de centro de Madrid, de prisas, hasta de bares y conciertos, que lo que me apetecía, ya que suponía un gran cambio en mi vida, era ir a un medio totalmente distinto.

Mirando el futuro

Creo me he adaptado bastante bien al día a día en una zona tan poco poblada. Leí una vez en un foro de españoles en el extranjero que muchos de nuestros compatriotas no se saben divertir si no es yendo de tapas y de juja, es como un “mal” muy español, sino hay farándula y cachondeo no saben que hacer y todo les parece un rollo, a mi esto me da pena en vez de hacerme gracia. Es muy probable que el asunto vaya por edades y lo que te apetezca con 25 años no es lo mismo que con 35.

Plaza Santa Ana, terrazas.

¿Echo de menos las cafeterías? ¿Los museos? ¿La tiendas de discos ¿ ¿las terrazas? Pues no mucho la verdad, todo eso es algo que tendré el resto de mi vida al volver, mientras este en este medio rural ya aprovecharé este tipo de estímulos en mis visitas a ciudades cercanas si es posible. Pero mientras este en el pueblo y alrededores disfrutaré tranquilamente del paso del tiempo sin prisa, sin todos esos estímulos que la ciudad me ofrecía y que a día de hoy me son totalmente innecesarios.

Vacas de nebraska

Puedo considerarme afortunado, me aburro pocas veces, como decía un amigo mío “soy capaz de sacar partido a las sinuosas formas que hace el gotelé en la pared y pasar un buen rato”… ahora mismo por la ventana de la cocina estoy viendo amanecer, dos pájaros echan a volar sobre el cable de la luz, los árboles están aun secos por el duro invierno nebraskeño, muy pronto cambiarán, esta misma semana ha entrado la primavera, un aliciente más mientras el reloj avanza

14 respuestas to “Contraste”

  1. A simple vista, parece que te conformes con poco. Para otros, esa actitud está relacionada con ser «tonto»: (Conformarse, simple, poco), lo que ellos no saben, es que lo tienes absolutamente todo. Pero nunca lo comprenderán por que es demasiado complejo para unas vidas simples y conformistas 😀
    Felicidades, y cuando te canses, vuelve 😀

  2. Eso es Julio, para mi el «tonto» es el que es incapaz de adaptarse a una situación nueva y distinta. No es más listo el que más tiene o necesita, para mi eso es una autentica pobreza. No es cuestión de cansancio, esto tiene caducidad (máximo tres años de esta manera) y es un reto apasionante, estoy seguro que mucha gente ni se atreve a dar el paso a cambiar su vida sumergido en su rutina y sus miedos, como yo lo estaba muchos años.

    Un saludo.

  3. Totalmente de acuerdo contigo. Creo que lo dije en el blog de Alex (no estoy seguro) pero nosotros pasamos de vivir en Barcelona (y yo antes en Madrid) a un pueblo de 120 habitantes en Asturias. Vivimos alli durante dos años y aunque los comienzos fueron difíciles mas tarde se convirtió en el lugar donde nos sentimos mas a gusto hasta ahora. Aunque en España los pueblos son muy diferentes de las grandes ciudades (y los caracteres de la gente también) no me puedo hacer a una idea lo que puede ser vivir en un pueblo en EEUU…
    Me alegra que lo lleves bien, con buena actitud y sepas sacarle partido a la experiencia. De eso se trata 🙂

  4. Que interesante Marcoiris, que has vivido por una situación parecida, es verdad que el comienzo es duro, pero luego creo que merece mucho la pena. Dice una amiga mía que uno no se puede cerrar en banda, hay que experimentarlo todo. No solo ciudad o solo pueblo, todo tiene sus ventajas e inconvenientes, al final lo que cuenta es donde uno es capaz de ser feliz, aunque creo que hay gente que nunca estará conforme en ningún sitio.

  5. Me ha gustado mucho esta entrada José, es muy introspectiva e interesante.
    Como sabes de buena tinta yo vivo desde hace más de 5 años una experiencia similar aunque en diferentes circunstancias: menos distancia de Madrid (1000 km), en un pueblo pequeño también (1800 habitantes), pero cerca (20 minutos) de una ciudad mediana- Poitiers- y de importantes ejes de comunicación por autopista y tren.

    Es absolutamente cierto que la opción perfecta no debe existir y casi todas tienen sus ventajas e inconvenientes. Ahora bien, en mi experiencia, creo que me resultaría muy difícil volver a vivir en Madrid. Echo mucho de menos a gente que dejé allí, en especial mi familia, pero cada vez que vuelvo por allá encuentro la ciudad cada vez más insoportable y tengo ganas de volver a mi calma chicha rural. Es difícil renunciar cuando te has acostumbrado al amplio espacio en tu casa de pueblo, al jardín, a los bosques, incluso a detalles tontos como aparcar todos los días en la puerta de tu casa.
    Y es verdad que se pierde vida social (aunque se crean poco a poco otro tipo de amistades, con menos faránduleo que en la ciudad quizás pero a lo mejor también auténticas), se pierde vida cultural (aunque Internet de banda ancha hace esto mucho más llevadero), los inviernos se hacen largos y duros, etc., etc.

    En fin, la elección de lugar de asentamiento- un lujo que se democratiza poco a poco y que antaño estaba al alcance de muy pocos- creo que se convierte en una de las decisiones clave de nuestras vidas. Y como tú dices hay que arriesgar, probar y evitar la actitud paleta de – «cómo en mi país/ mi ciudad/ mi pueblo, en ningún sitio» – sin conocer otras opciones.

    Un abrazo y disculpas por la larga chapa que me acabo de echar
    Daniel

  6. No es ninguna chapa, me ha encantado lo que comentas y estoy de acuerdo y lo entiendo. Un abrazo rural 😉

  7. SINCEROS RESPETOS Y ENHORABUENA!! Por mucho tiempo he pensado que estaba loco, porque me resisto a vivir en grandes ciudades, este pueblo donde vivo en la actualidad esta a unos 15 minutos de Montreal y somos 52 mil habitantes, me encantan los pueblos chicos, como ese de 300 habitantes, donde todo el mundo te saluda y tu a ellos, donde sientes mas cerca de la naturaleza y donde tienes tiempo para pensar, algo que se esta olvidando.
    De mi trabajo de camionero durante años lo que mas me encantaba era esa soledad donde era solo yo, manejando ese monstruo y belleza al mismo tiempo por las interminables rutas del oeste americano, cuando atravesaba el hwy 80 en Nebraska y subía hacia las rocosas, poco a poco sin darte cuenta y cuando ya estas arriba de todo en la cima de una montaña y estacionas tu camión hacia el sur , ves la inmensidad de las montañas , las estrellas de noche y esa luna llena que parece que esta al alcance de tu mano, esta sensación de espacio ,grandeza y de luz no la he tenido en mi pueblo en Cantabria , lo siento pero es como dice Daniel: como mi pueblo no hay otro, vaya falacia mas grande , generalmente quienes dicen eso son gente de poco espíritu, con una muy corta visión de la realidad y encima son quienes nunca han salido del pueblo..
    Cuando regrese por primera vez al pueblo después de 5 años por los USA y Canadá , algo que parece ser nos pasa a todos , me quería regresar a la semana , había visto a mi padre a mi hermana ,la familia , listo, ya no se me perdía nada..
    Quiero terminar dándote mis felicitaciones por ese entendimiento de algo que en nuestra patria lo han endemoniado mediaticamente

    Un saludo afectuoso
    Joze

  8. Gracias Joze, tiene que ser precioso eso que cuentas, en soledad, conduciendo esos monstruos de la carretera, viendo los paisajes pasar, las noches estrelladas, que delicia. Yo en la ciudad no veía las estrellas y siempre había luz, no experimentaba la oscuridad total nunca, salvo cuando iba al pueblo de mi suegra en Ávila.

    La ciudad tiene muchas cosas que me gustan, pero ahora prefiero estar aquí.

  9. Tienes que ir hacia el west en Wy. En Rawlins se puede decir que ya estas bien alto de ahí hasta Little América salida creo que es la 66 (hace como 8 años que no voy por esos lados) os quedáis en el Motel que hay en el truck stop, es una pasada ese truck stop las duchas para los camioneros son en mármol, comes unas hamburguesas como de medio kg, al mismo tiempo Conversas con los drivers y lo pasas de p.m…

    Como te decía, en Rawlins la descripción que te he hecho es del truck stop el Flying J salida 209 del hwy 80 , cuantas noches he dormido allí, otras veces me tiraba hasta Little América de ahí puedes tomar el hwy 30 y te lleva hasta Pocatello en Idaho todo ese trayecto es para recorrerlo de día ya que de noche es paso de cientos de ciervos y puede que jo… s el auto, eso si! la cámara lista en todo tiempo a veces cuando iba con algún driver de Canadá nos tirabamos hasta el Pilot en Evanston ya casi con Utah, la bajada hacia Salt Lake City eso es de pasada.en medio del camino encuentras un anuncio que dice Jeremy Jonshon ranch que por cierto hay una película con e mismo nombre protagonizada por Robert Redford

    Bueno que me embalo con mis viajes de trockero por los USA, de seguir así saldré del retiro

    Un saludo
    Joze

  10. Creo que ya te lo he dicho alguna vez -aunque sea tácitamente-, leyendo este blog me parece estar viendo capítulos de Dr. en Alaska, nuevos, y de los buenos

    Un abrazo, Lino Fleischman

  11. IMPRESIONANTE!!

    Sin desmerecer para nada al resto, pero éste me ha parecido el post más bello de los que has escrito en algunos meses.

    Sinceridad y madurez a raudales. Mis sinceras felicitaciones por estar a gusto y en paz contigo mismo de esa manera tan bella y enriquecedora.

    Comparto todas y cada una de tus palabras.

    Un abrazo!

  12. Muchas gracias Yomismo.

  13. Un abrazo Tacitus, recuerda a Doctor en Alaska, pero por aqui no hay ningun indio, bueno en South Dakota si quedan.

  14. […] está echada. Conozco a quien se vuelve a Madrid sin plantearse pasar un año más aquí, y a quien se encuentra cómodamente ubicado. Yo, personalmente, he cambiado ligeramente de opinión desde que os conté aquello de […]


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