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Hace aproximadamente diez años mi mujer y yo éramos dos jóvenes enamorados cuya ilusión era pasar juntos un verano en Londres. Ella ya había estado allí el año anterior y yo de paso en un Inter-Rail, pero vi que era mi ultima oportunidad para hacer lo que otros muchos han hecho en Londres, buscarse la vida unos meses, tener un trabajillo y mezclarse con el devenir de la gran urbe cosmopolita.

Nos alojamos en un piso en South Kensington, una zona estupenda en el centro, barrio algo pijo pero con un alquiler asequible para una habitación. En pocos días encontramos trabajo, los dos en el mismo restaurante de Pizza Hut y con lo que ganábamos más las propinas éramos los dos seres más felices del mundo. Las historias no serán muy diferentes a las que otros han vivido allí, en el trabajo rodeados de inmigrantes de todo el mundo, conociendo pocos ingleses, las cenas en casa juntándote con italianos y españoles que están allí viviendo como tú, etc…

La verdad es que con eso de trabajar tuvimos poco tiempo libre, pero aprovechamos bien la estancia, museos, mercadillos, parques, etc.… se puede decir que nos empapamos de la ciudad en la medida que pudimos, acostumbramos el oído al idioma y cuando mejor estábamos acoplados nos tuvimos que venir.

Allí cumplimos nuestros primeros 10 meses juntos y lo celebramos con tarta y todo.

Ayer reservamos vuelo y alojamiento para volver y recordar nuestros días en Londres, seguimos estando enamorados y nos sentimos igual de jóvenes que entonces. Esta vez pasaremos en Septiembre, coincidiendo con nuestro décimo aniversario como pareja, cinco noches para pasear, ver todo lo que se nos quedó en el tintero aquella vez, como por ejemplo Abbey Road o el Imperial War Museum, y hacernos una escapada a Brighton a ver con nuestros propios ojos la meca de los Mods.